Entre las múltiples propiedades de la vitamina D, destacan la regulación del sistema inmune, del sistema muscular y del cardiovascular; además es una vitamina que también se encuentra en el cerebro, en concreto, en las áreas cerebrales relacionadas con la función cognitiva, por lo que está vinculada a los procesos de la formación de los recuerdos y de la memoria (Gáll y Székely, 2021).