El alcohol y el tabaco son las sustancias psicoactivas más consumidas en España, tanto por los jóvenes como por la población adulta. Al comienzo de la pandemia ocasionada por el SARS-CoV-2 se transmitía información de que la nicotina era un factor protector frente a la infección, pero la evidencia científica muestra los efectos que el consumo del tabaco ocasiona sobre las personas.