El consumo de drogas constituye un problema social y sanitario que afecta a un gran número de jóvenes y adolescentes españoles. En la actualidad, su consumo va asociado a la cultura del ocio y a las relaciones sociales, a diferencia de lo que sucedía en la década de los 80 en nuestro país, donde el consumo de sustancias se asociaba a sectores marginales de la población y a la delincuencia (Plan Nacional sobre Drogas, 2007).
Hay una gran variedad de sustancias tanto legales como no legales, al abasto de los jóvenes. Dentro de las drogas legales, las más consumidas son el alcohol y el tabaco, que suponen un 76,6% y un 40,2% respectivamente. En cuanto al consumo de drogas de comercio ilegal, el cánnabis es la sustancia con mayor prevalencia de consumo alguna vez en la vida (27,4%) seguida de la cocaína en polvo (8,8%). (Observatorio Español de la Droga y las Toxicomanías , 2013).
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